miércoles, 20 de febrero de 2008

dragón de komodo


El dragón de Komodo es el lagarto más grande del mundo.

Es un animal solitario, excepto durante la época de cría, y es territorial.

Caza durante el atardecer hasta que se hace de noche. Durante el día, en momentos de máximo calor, se muestra inactivo.

Caza sorprendiendo a las presas, aunque puede correr a velocidades que llegan a los 20 km/h en distancias cortas.

Cazan en grupo grandes presas. Es el lagarto más inteligente, desarrolla habilidades para la caza.

Se guía para la caza por el olfato, aunque tiene una buena vista.

El dragón de Komodo es un animal muy peligroso para el hombre. Puede atacar al hombre para comérselo

Es capaz de tragar grandes piezas debido a su cráneo flexible y sus mandíbulas movibles.

Es un animal muy voraz con una gran capacidad de ingestión, traga sus presas muy rápidamente.

Los dientes, parecidos a los de los tiburones, de 60 piezas que se renuevan cuando se pierden. No están diseñadas para masticar por lo que el dragón de Komodo ingiere los pedazos de carne enteros.

Aunque la presa sobreviva a un ataque efectuado por este reptil, morirá por una infección por cuatro tipos de bacterias patógenas que se encuentran en las fauces del dragón de Komodo. El reptil acosará a su presa enferma hasta que caiga muerta, momento que aprovechará para comérsela.

El dragón de Komodo es un animal caníbal, se alimenta un individuo adulto de jóvenes, viejos o dragones de Komodo enfermos.

Como viven en lugares donde el agua y la comida es escasa, aprovechan todas las partes de la presa, incluso la piel, las plumas, la cornamenta y las pezuñas, y pueden vivir perfectamente comiendo sólo una vez al mes, complementando su alimentación con pequeñas presas.

Si hay alta disponibilidad de comida, prefiere alimentarse de carroña antes que cazar para ahorrarse energía.

No necesita beber, aprovecha enormemente el agua de la comida. Se refugia en madrigueras para protegerse del calor del mediodía y del frío de la noche.

Las madrigueras las construye gracias a sus poderosas extremidades anteriores en los lechos de rieras o en colinas y miden más de 1 metro de profundidad.

Sabe nadar muy bien y es capaz de trepar por los árboles.

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